lunes, 3 de mayo de 2010

Helado Corazón XV

Hoooooooola! :D Qué tal? ^^ Perdonad por la tardanza en escribir, es que si no escribís comentarios, no sé si lo habéis leído o no! >.<>.> En fin, muchísimas gracias a tod@s y... leed :l Es lo único que se me ocurre escribir. xD

Besos//* ^^

XV

“Love story…?”

-Aunque sea un poco… infantiloide, es buena idea. –dijo Michelle- Lo único que nos queda si no nos decidimos…

-¡Va, va! –siguió diciendo Nat-.

Nos preparamos todas poniendo la mano tras la espalda. Michelle ponía los ojos en blanco seguramente pensando: “¿Por qué tengo que hacer esta chorrada?”… Mientras que las demás estábamos… no emocionadas, pero tampoco desilusionadas por tener que usar este método. Y Eric… pues… con cara de estar pensando: “Luego dicen que los vampiros son peligrosos…”

-¡Piedra,…! –empezó a decir Nat-.

-¡…papel,…! –dije yo-.

-¡…tijeras! –gritamos todas a la vez-.

-Pe… pero es que yooo… -empezó a decir Nat cuando vio que tenía tijeras mientras que todas teníamos piedra- ¿Y si lo mato?

-¡Qué más te da! –dijo Michelle cruzándose de brazos. Tras ser fulminada con la mirada de parte de Nat, levantó la ceja- ¿No?

-No me lo perdonaría. –dijo bajito- Quiero decir… ¡si matase a un humano inocente no me lo perdonaría! No tiene que ver este en particular… para nada…

-Sisisisi… claaaaaaro... –dije yo para picarla un poco, pero me gané un puñetazo en el hombro-.

-Bueno, lo vas transformando ya o…? –dijo Michelle mirando por una ventanita de la celda- Va a amanecer en una hora… o menos.

-Vale, pues… allá voy… -dijo Nat acercándose a Eric, que temblaba-.

Le cogió de los hombros, se acercó más a él y le mordió en el cuello. Eric empezó a chillar de dolor, lo cual empezaba a despertar a los demás reclusos.

-¡Rápido! ¡Cógelo y larguémonos! –dijo Michelle ahogando la voz-.

Empezó a sonar una sirena que no nos gustaba nada de nada. Maia y yo abrimos un agujero en el techo de la celda por donde escapar. Subimos dando un salto y ayudando a Nat a llevar a Eric mientras este chillaba sin poder contener el dolor.

Llegamos a casa. Nat colocó a Eric en el sofá para que pudiese descansar mientras durase. Parece que Michelle percibió en “algo” que a Nat le gustaba Eric…

-¿Qué, Nat? ¿Guapo, el humano? –dijo Michelle riéndose mientras se sentaba en la butaca y las demás en los sofás de alrededor. Nat por supuesto, se sentó en el mismo en el que Eric estaba inconsciente-.

-Esto… pues… -empezó a decir Nat- ¡Vale, sí! ¡Me gusta! ¡Y mucho!

Nos echamos todas a reír mientras ella ponía pucheros.

-Sois crueles. –dijo Nat frunciendo el ceño-.

-Lo sabemos. –dijimos las tres riéndonos-.

Pasaron tres días normales. De día, hablar, comentar cosas de nuestro pasado como humanas, probar nuestra fuerza y velocidad y nuestros dones. De noche, visitar cárceles para tomar “el aperitivo”. Y todo esto con Eric tumbado en nuestro sofá. Lo único que diferenciaba estos tres días de los anteriores, es que Nat apenas se separaba del sofá donde estaba Eric.

-Nat, ¿por qué estás ahí pegada todo el día? –dijo Michelle una tarde, cuando no había mejor cosa que hacer-.

-Pues… porque… -empezó a decir ella mientras pensaba en algo- ¡Se puede despertar en cualquier momento! ¿Y si no estamos aquí, qué?

-Ya… lo que digas. –respondió poniendo los ojos en blanco-.

-¡Se está despertando! –gritó Nat-.

Nos acercamos todas y él empezó a abrir los ojos.

-¿Qué… qué ha pasado? –dijo Eric, incorporándose- ¿Dónde estoy?

-¡En una casa árbol! –soltó Michelle haciendo aspavientos con las manos-.

-¿No te acuerdas de nada? –dijo Maia ignorando a Michelle-.

-De algo… -respondió moviendo la cabeza- Estaba en la cárcel porque me acusaban de matar a mi familia, luego aparecisteis vosotras, creo y… ya no me acuerdo de más.

-¿Lo de los vampiros? –dije yo-.

-Sí… eso creo que sí. Y que creíais que a mi familia los mataron unos de ellos.

-Ajá. –dijo Nat- Y te acuerdas de algo como… ¿transformar? O… ¿transformación?

-Ah, sí. Que me queríais transformar en uno de vosotros, ¿no es así?

-Sí. Eso exactamente. –dije yo- Y… ¿te acuerdas de que se llegase a cumplir?

-Me acuerdo de… ¿piedra, papel y tijeras? ¿Puede ser? –dijo riéndose-.

Empezamos todas a reírnos y asentir con la cabeza.

-También me acuerdo de que gritaba alguien… -siguió diciendo Eric-.

-Sí, tú. –dijo Michelle fríamente-.

-¿Por qué gritaba? ¿Qué me ha pasado? –dijo confuso-.

-Pues… te hemos transformado. Ahora eres vampiro. –le respondió Nat-.

-¿Quéeeeeeeeeeeeee? –gritó Eric- ¿Va en serio?

-Totalmente. –dijo asintiendo Maia-.

-Mira. – Michelle se sacó un espejo del bolsillo y se lo dio a Eric para que se viese-.

Lo cogió y se miró. Puso cara extraña.

-Estoy… raro. –dijo moviendo la cabeza- Y los ojos…

-Sí, rojos. –dijo Michelle asintiendo- Como los nuestros.

-Puff… -respondió Eric devolviéndole el espejo a Michelle- Es… extraño pero… mola.

Y se echó a reír mientras se sentaba en el sofá.

-Ah, por cierto… -empezó a decir Michelle mientras sonreía maliciosamente mirando a Nat- A Nat le gustas, ¿vale? Hala, ya lo sabes.

Nat se quedó con la boca abierta mirando a Michelle y diciéndole moviendo los labios: “¡Te odio!”. A lo que ella respondió:

-Yo también te quiero, Naaat –dijo sonriendo-.

-¿De verdad, Nat? –dijo Eric fingiendo estar serio-.

-Pueeeees… -empezó a decir ella- Puede…

-Humm… -contestó él mirando a los lados- Vaya, no pensé que encontrara algo más guay que ser vampiro.

Se rieron. Maia, Michelle y yo pusimos cara de “¿Tendremos que soportar esto toda la eternidad?”

-Ah, por cierto. –desvió la conversación, Eric- Me habíais hablado de dones o algo así… ¿vosotras tenéis alguno?

-Correr más rápido que otros y… aunque suene raro, ocultar mi olor. –respondió Nat riéndose-.

-El mío ya lo sabes, detector de mentiras parlante. –dije mirando mal a Michelle por su comentario del otro día-.

-Saber otros dones. –continuó Maia-.

-¡Y yo no tengo ningún puñetero don! –dijo frunciendo el ceño y cruzando los brazos, Michelle-.

-¿Yo tengo alguno?

-Humm… No sé. –dijo Maia mientras se concentraba-.

Al segundo, paró y nos miró con frustración.

-Es muy pronto. No detecto ningún don aparte de los suyos. –derrepente puso cara extraña y volvió a concentrarse- ¡Esperad, esperad!

Nos quedamos todos perplejos mirándola mientras ella tenía los ojos cerrados y las manos en la cara, concentrada. Los abrió.

-¿Qué ocurre, Maia? –dijo Michelle, empezando a preocuparse-.

-Detecto un nuevo don… -se giró hacia ella- Y viene de ti.

[...]

3 comentarios:

  1. Me guuuutaaaah!!muy bien caracterizado mi personaje:P.Eric y Nat un poco empalagosos XD,pero ya les he ahorrado el primer paso jajaja.
    P.D:Mi doooon!!ya va a saliiir!!:D e Ian??cuando sale??

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  2. Pues a mi no me parece nada empalagoso,mas bien me parece,PRECIOSO!!!!!!!!!!!!OOoooooooooooh!!!..
    me parece genial k michelle tenga un don!!,pero no mejor k los DOS mios,muahahahah!!!..=).

    y,me he enamorado de Eric!!(L)jejeje

    Que buenoooooooo.
    bueno me a encantado tu sigue,k as dejado con mucha suspense lo de sus dones.(de michelle y de ERIC)
    y k pasara con eric y con nat.
    besos!!*=P

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  3. Aaaaaah, cuanto tiempo sin comentar (soy una vaga u.u)
    por cierto, me está gustando mucho aunque(por variar) le veo alguna pega...
    La primera es cómo reaccionan los personajes en el momento de la declaración es taaaaan...
    A ver, si yo fuera Nat lo negaría y probablemente le dedicaría una mirada de odio a Michelle, no sólo las palabras "Te odio"
    Y si yo fuera Eric no sería tan inconsciente y confiado, y si en realidad alguna quisiese matarlo, que?...
    Pero me gusta aún así, xD
    Sigue, sigue, sigue, sigue, sigue, sigue y aunque no comente ten en la cabeza una simple palabar... "SIGUE!" ^^

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